La pandemia aceleró la implementación del teletrabajo en muchas empresas. Si bien esta modalidad ofrece grandes oportunidades, flexibilidad y beneficios, también plantea nuevos desafíos en cuanto al control de la jornada laboral y la productividad. Un reciente caso y su sentencia pone en manifiesto los riesgos de abusar de estas facilidades laborales.
La respuesta es que, si no se demuestra la necesidad por parte de la empresa, ésta no puede exigir la presencialidad en el trabajo a sus empleados.
El teletrabajo irrumpió con fuerza durante el confinamiento estricto al comienzo de la crisis sanitaria y, desde entonces, es una realidad al alza en España.
Te contamos las principales novedades que introduce la nueva Ley que regula el trabajo a distancia, en vigor desde el 13 de octubre.
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