Si un conductor duda si ha sido multado, la peor opción es despreocuparse. En la actualidad una rápida consulta a la sede electrónica de la Dirección General de Tráfico evita un proceso burocrático que suele acabar mal.
Cuando tanto un agente como un radar detectan una infracción, lo normal es que llegue una notificación al buzón, en forma de carta certificada. Pero puede ocurrir que bien por cambio de domicilio, datos erróneos o por pérdida, esa notificación no llegue a manos del interesado y no se entere de su multa.
Esa sanción se publicará en el tablón de anuncios del Ayuntamiento o en Boletín Oficial de la Administración correspondiente. Lo normal es que los tiempos corran, pase el plazo del pago voluntario, así como la voluntad de recurrir. Sin embargo, una consulta por internet soluciona esta situación.
Y es que desde 2010 las sanciones se notifican a través de un tablón electrónico, el TESTRA (Tablón Edictal de Sanciones), en el que se puede consultar mediante el DNI, nombre y apellidos del titular o matrícula del vehículo.
También existe la Dirección Electrónica Vial (DEV) que facilita aún más el asunto. Este servicio gratuito de notificaciones sustituye a la dirección postal por una electrónica, de forma que no es necesario consultar el TESTRA. Todas las multas y comunicaciones de la DGT, así como otras administraciones dadas de alta en el TESTRA) llegarán por correo electrónico, y si se desea, por SMS. Mientras el conductor esté dado de alta en la DEV deja de recibir notificaciones en papel, pero puede darse de baja cuando pueda.
De esta forma es más fácil estar informado de las posibles infracciones cometidas, pero es importante contar con el asesoramiento de profesionales en el caso de reclamar o no estar de acuerdo con la sanción impuesta.
