El pago de peajes en las autopistas, en especial en aquellas en las que constituyen la única forma de llegar a ciertos lugares, es un punto de polémica para muchos conductores, que en ocasiones optan por saltarse el pago.
Muchos de estos conductores alegan que “no pasa nada”, y sin embargo esto no es cierto, dado que está regulada como una infracción administrativa. Así lo recogen dos leyes: la Ley de construcción, conservación y explotación de autopistas en régimen de concesión y la Ley sobre Tráfico.
En la actualidad la multa suele rondar sobre los 100 euros. Pero no es una cantidad fija, sino que la suele fijar el Juez, y puede llegar a los 200 euros. Esta horquilla de euros no depende del precio del peaje o de la longitud del tramo, sino que suele tener en cuenta determinadas circunstancias como la violencia, insultos o peligro para otros conductores en el momento de cometerse la infracción.
Estos condicionantes los tiene que tener muy en cuenta tanto el infractor como su representante legal, ya que puede cambiar mucho el importe de la infracción.
