En un giro emocionante para la comunidad cultural y de investigación, España ha dado un paso significativo hacia adelante con la revisión de su Ley de Mecenazgo. El Real Decreto-ley 6/2023, firmado el 20 de diciembre de 2023 y puesto en vigor el 1 de enero de 2024, marca un cambio trascendental en el terreno del mecenazgo, con el objetivo principal de incentivar las donaciones a entidades sin ánimo de lucro.
Una de las reformas más destacadas es el aumento de los beneficios fiscales para los donantes, abarcando tanto a individuos como a empresas, además de los no residentes que invierten en el país. Esta reforma no solo reconoce la generosidad de los donantes, sino que también busca impulsar una mayor inversión en proyectos culturales e investigativos.
Entre las reformas más notables se encuentra el aumento de los porcentajes de deducción de los donativos. Por ejemplo, para las personas físicas, la base de deducción se ha elevado de 150€ a 250€, con un 80% de deducción para donaciones inferiores y un 40% para aquellas que superen los 250€. En el caso de las empresas, el porcentaje de deducción en el Impuesto sobre Sociedades ha subido del 35% al 40%, con un límite de base imponible del 15%, antes era del 10%.
Además, se ha introducido la novedosa idea de las donaciones recurrentes, es decir, aquellas realizadas por el mismo monto o superior durante dos años consecutivos a la misma entidad sin fines de lucro, que ahora disfrutarán de una deducción del 45% para las personas físicas y del 50% para las empresas.
Otro aspecto interesante es la inclusión de nuevos casos para la deducción por donativos, como la cesión de uso de bienes muebles o inmuebles sin contraprestación alguna durante un período determinado.
Además, se ha permitido a los donantes recibir retribuciones simbólicas en forma de bienes o servicios, siempre que estos no superen el 15% del valor de la donación y respeten un límite máximo de 25.000€.
Estos cambios no solo benefician a las entidades sin fines lucrativos y a los donantes, sino que también tienen un impacto directo en el fomento de la cultura y la investigación. Al ofrecer incentivos fiscales más atractivos, se promueve una mayor participación en el tercer sector, satisfaciendo así las demandas tanto de las entidades culturales como de los agentes implicados en la investigación.
La nueva Ley de Mecenazgo representa un paso adelante emocionante en el apoyo a la cultura y la investigación en España. Con un marco legal más propicio, se impulsa la colaboración entre el sector público y privado, lo que contribuye a un desarrollo más sólido y sostenible en estos ámbitos tan vitales para el progreso de la sociedad.