La Unión Europea (UE) ha creado un paquete de fondos inédito, de más de 2.024 billones de euros, para reparar los daños causados por el Covid-19 y transformar la economía, divididos en tres programas: el Marco Financiero Plurianual 2021-2027 (MFP), con un presupuesto de 1.074 billones; el Plan Europeo de Recuperación (Next Generation EU), dotado con 750.000 millones; y, por último, un Fondo de Garantía del Banco Europeo de Inversiones, con 200.000 millones de euros.

Y entre ellos, hoy profundizamos en el Plan Europeo de Recuperación, el instrumento temporal de emergencia para acelerar la recuperación sostenible de la UE, mitigar los daños económicos y sociales inmediatos y preservar y crear puestos de trabajo.

Una oportunidad única para el tejido empresarial, en un momento singularmente adverso, que prevé la inversión de 140.000 millones de euros en nuestro país y, por ello, animamos a pymes y autónomos a valorar las líneas maestras del plan, de forma que puedan presentar proyectos alineados con sus directrices.

El plan responde a tres objetivos principales:

  1. Ayudar a los Estados Miembros a recuperarse, reparar los daños sufridos y salir reforzados de la crisis
  2. Relanzar la economía y apoyar la reactivación de la inversión privada
  3. Aprender de las lecciones de la crisis y abordar los retos estratégicos de Europa.

En función de estos objetivos, se plantean una serie de instrumentos para canalizar estas ayudas, que pivotan de forma transversal en torno a tres pilares de dinamización económica: el Pacto Verde, la Transición Digital y la Reindustrialización.

Pacto Verde

La UE apuesta por la transición ecológica y fija en este sentido, el objetivo de conseguir la neutralidad climática y una economía sostenible en Europa en el año 2050.

En esta línea, se valorarán los proyectos empresariales orientados a:

  • Descarbonización del sistema energético: se busca potenciar el uso de fuentes de energía alternativas más limpias y el desarrollo del sector eléctrico basado en gran medida en fuentes renovables, completado con un rápido proceso de eliminación de los combustibles fósiles.
  • Uso eficiente de la energía y recursos: orientado a fomentar un sector de la construcción más limpio y eficiente, empezando por los Estados, que deberán emprender una “oleada de renovación” de edificios públicos y privados. Además, se espera con ello reducir la factura energética y atenuar la pobreza energética.
  • Contaminación cero: para reducir la contaminación de manera rápida y eficiente, buscando soluciones a la contaminación del aire, agua, suelo y productos de consumo.
  • De la granja a la mesa: con el fin de garantizar una cadena alimentaria más sostenible y asegurar que los ciudadanos obtengan alimentos sanos, asequibles y sostenibles.
  • Economía circular: medidas de actuación en las distintas etapas del ciclo de vida de los productos, desde la producción y el consumo, a la gestión de residuos y el mercado de materias primas secundarias, que se traducirá en un mayor empoderamiento del consumidor.
  • Movilidad sostenible e inteligente: el objetivo es reducir el 90% de las emisiones procedentes del transporte a 2050, gracias al fomento de medios de transporte más sostenibles como la movilidad multimodal automatizada y conectada, especialmente en vehículos.

Transición Digital

Las estrategias de la UE en materia de datos y de Inteligencia Artificial (IA) buscan animar a las empresas a trabajar con estas nuevas tecnologías y a desarrollarlas para, por un lado, crear un único mercado europeo de datos, tanto públicos como públicos, permitiendo que fluyan libremente por la UE y entre sectores; por el otro, promover el desarrollo de la IA estableciendo las opciones disponibles para maximizar los beneficios y abordar los retos.

Las iniciativas que quiera ser parte de esta Estrategia Digital de la UE, deberán contemplar:

  • El apoyo al desarrollo de sistemas tecnológicos y nuevas infraestructuras que permitan a las empresas aprovechar las oportunidades de la economía de los datos.
  • Favorecer el intercambio de datos mediante una adecuada gestión de los ciberriesgos.
  • Establecer medidas sectoriales para construir espacios comunes de datos, en ámbitos estratégicos e interés público.

Reindustrialización

Se trata de impulsar la competitividad industrial de la UE, a la vez que se alcanzan las ambiciones climáticas y digitales. Para ello, la Unión Europea ha identificado seis cadenas de valor estratégicas para impulsar la competitividad industrial y ayudar a alcanzar la ambición climática:

  • Ciberseguridad
  • Internet de las Cosas (IoT)
  • Salud Inteligente
  • Sistema y tecnologías de hidrógeno
  • Industria con bajos niveles de Co2
  • Vehículos conectados y autónomos

Para garantizar el uso óptimo de los recursos y la asignación de estos importes, los proyectos a presentar tienen que pivotar principalmente en cuanto a Pacto Verde y Digitalización. Además, a nivel nacional, será necesario potenciar la colaboración público-privada para garantizar la canalización de los fondos hacia la economía productiva.

Hay que tener en cuenta que el 70% de los fondos europeos se adjudicarán entre 2021 y 2022 y el periodo de ejecución y consumo será entre 2021 y 2026, más intensamente a partir de 2023.

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